28 de noviembre de 2012

Conviviendo con alemanes - Parte I


A pesar de llevar en Colonia casi 5 meses, la mayoría de la gente que conozco son extranjeros, que al igual que yo han vivido o viven con alemanes y prácticamente todos estos amigos sobreviven el día a día con sus compañeros de piso esperando saber que será lo próximo con lo que les sorprenderá.

Por suerte o por desgracia, por el momento y sin vistas a que en un futuro próximo la situación cambie, he dejado de compartir techo con alemanes, pero tengo una amiga-fuente de anonadamiento que casi todos los días tiene una historia de miedo que contar.


Todo empezó una tarde fría en el verano alemán, cuando la futura víctima se disponía a mudarse de casa y conoció a una señorita alemana, que a primera vista parecía normal y hasta simpática, pero que con el paso de los meses fue desprendiéndose poco a poco de la máscara, hasta mostrar su verdadera cara.

Lo primero fue el extremismo de la susodicha por la comida vegetariana, los productos bio y la imposibilidad de ver algo proveniente de animales, sin importar que fuese leche o queso. Pero llegó un momento en que hasta la harina y el arroz debían de ser especiales, porque si no podrían contener a saber que cosa, que le imposibilitaba su ingesta. Todo esto fue añadido a la negación absoluta de tomar medicamentos y optar por productos homeopáticos para el tratamiento de cualquier enfermedad.

Bueno, mientras que a mi no me digas nada, quédate con tu col roja y tus bolitas en frasco, que yo me voy a meter entre pecho y espalda este chuletón. Fue lo que pensó nuestra víctima. Y al principio parecía que todo iba sobre ruedas. Nadie se metía con nadie y los problemas se solucionaban hablando.

Hasta que un día...
De forma absolutamente casual, la víctima comenzó a pensar que estaba volviéndose loca.
Metódicamente, día tras día, al volver a su habitación tras una breve visita al supermercado de la esquina, encontraba los papeles del escritorio descolocados y alguna vez hasta las pestañas abiertas en el ordenador estaban en un orden diferente. Tengo fantasmas, pensó.
Dejó correr el hecho, pues siempre podía tratarse de un despiste, pero había ya una idea que le empezaba a carcomer por dentro. Como es posible que el papel en el que acabo de apuntar la dirección a la que tengo que ir mañana esté a mi vuelta en mitad de todo el montón?? Se preguntaba con frustración.

Un día la situación se volvió un poco más rara, pero a la vez fue el detonante de que todo comenzara a aclararse. Vaya! y este boli? que hace esto en mi escritorio? esto no es mío, pero yo lo he visto en alguna parte... mmm... claro! este boli es de mi compañera!! pero como ha llegado hasta mi mesa?¿
Tras este hecho, descubrió que realmente no tenía fantasmas, sino una Mitbewohnerin muy cotilla y entrometida. Y ahora que hago? se lo devuelvo? eso va a ser muy embarazoso... que le digo? oye! te has dejado el boli en mi habitación mientras estabas hurgando entre mis cosas. Ufff, no es plan. Mejor lo dejo en la mesa de la cocina sin más que decir.

Como consecuencia de esta pillada parecía que a la compañera le había llegado un poco de sentido común al cerebro y durante un tiempo las cosas permanecieron en su sitio.
Pero tan solo fue algo temporal y un día en el que nuestra querida víctima llegó a casa pronto del trabajo se encontró al gato con las manos en la masa.
Que raro, que hace la puerta de mi habitación abierta y la luz encendida? me lo dejé así esta mañana al salir con prisa? no creo... Y al poner un pie dentro de la estancia y mirar a su interior encontró a su compañera en el centro de su habitación, hablando por teléfono.
Que haces aquí? preguntó confusa. Eehh! si... bueno... es que... verás... yo solo quería saber si estabas en casa... Fue la gran excusa, detallada y creíble, que defendía con claridad, el hecho de haber sido encontrada en medio de una habitación ajena a la suya. Estabas mirando a ver si estaba escondida debajo de la cama o detrás del armario, verdad? Tendría que haberle dicho nuestra víctima. Pero claro, en el momento una no sabe que decir. Y la recién descubierta malhechora abandonó la habitación con la cara igual de roja que sus queridas coles.

Desde ese día, la víctima no ha encontrado pruebas de una nueva intrusión en su habitación. Aunque no os penséis que os significa que la compañera se ha vuelto normal, no señores, ni mucho menos cerca de la realidad, lo que pasa es que ahora se ha focalizado en otro tema, que es controlar exhaustivamente la pulcritud en la limpieza de las zonas comunes que nuestra víctima realiza.

Pero eso queridos amigos, eso ya es otra historia.


Conviviendo con alemanes - Parte II

Un saludo!!





Estoy enlazando esta entrada a la fiesta de enlaces de Personalización de Blogs.

27 de noviembre de 2012

Subterráneo superficial

En general, hablando a grandes rasgos y sin profundizar mucho en el tema, podemos decir que el metro de este país es, dejémoslo en curioso.
El metro, en alemán U-Bahn, palabra acortada de Untergrundbahn, traducido al cristiano como tren bajo tierra, tiene en su mayor parte del recorrido la extraña manía de viajar por la superficie. Quizás en el centro de las ciudades si que haga honor a su nombre y vaya, como es lógico, bajo tierra. Pero en el momento en el que nos salimos aproximadamente 2cm de lo que se podría considerar como centro, el tren sale a la superficie para no retornar nunca más a sus orígenes. Es algo así como el Guadiana, ahora lo ves, ahora no lo ves.

Cuando estuve en Berlín había dos líneas del metro que se entrecruzaban y debido a unas obras se habían vuelto absolutamente locas, llegando al extremo de que sin bajarte del vagón eras cambiado de línea y para seguir en la misma dirección debías hacer un transbordo. Lioso, verdad? pues imaginaros la primera vez que me monté. Llegamos al punto en cuestión, dicen a saber que por los altavoces y el tren se mueve, pero no en la dirección que debería tomar, no, resulta que terminamos en la estación anterior... al final una buena mujer que chapurreaba el español terminó apiadándose de nosotros y nos llevó por el buen camino.

Aquí en Colonia la cosa se vuelve más rara si cabe, hay 11 líneas del metro, comúnmente denominadas con la "U" más el número de la línea en cuestión. Y extrañamente muchas veces he tenido que coger la U16 o la U18, como es eso posible si el número de ellas asciende a un total de 11?? En España, o al menos en Madrid, se nombran en orden, hasta la Circular tiene su propio número. Pero aquí no, aquí por extraño que parezca en los organizados cabezas cuadradas, los números de las líneas del metro son escogidos al tun tun, o al menos esa es la impresión que da. 


Si vemos el plano del metro de Colonia nos encontramos con la U1 y lo lógico es que después viniese la U2 pero no, la línea número dos no existe... luego vienen la U3, la U4 y la U5, gracias. Pero tras esta línea todo se vuelve un caos, los siguientes números no siguen un orden lógico para nada U7, U9, U12, U13, U15, U16 y U18.

Como es posible la existencia de este caos en un país tan organizado!? Siempre pensé que debía de existir una razón para esto. Y al final, dándole un poco al cabezo y fijándome en el plano, he podido averiguar que las líneas del metro que faltan son las líneas del S-Bahn...
Que es el S-Bahn? os preguntaréis. El S-Bahn o Stadtschnellbahn, mejor llamémoslo tranvía, es, en teoría, igual que el U-Bahn, con la diferencia de que va por la superficie... bien... pero el U-Bahn también va por la superficie... si, pero... pero... no sé, realmente no sabría decir en que se diferencian... bueno si, el S-Bahn tarda algo así como millones de años en llegar, se lo presupone rápido, por eso de schnell = veloz, pero en la realidad tarda lo mismo que el metro y además pasa por las estaciones cada 20 minutos.
Aunque a pesar de eso los números 8, 10 y 14 siguen sin emparejamiento… tengo curiosidad por saber que fue lo que les pasó.

Por otra parte, el centro de Colonia está muy bien comunicado con los barrios de alrededor, casi todas las líneas del U-Bahn tienen al menos un par de paradas en algún punto céntrico, por lo que puedes llegar a encontrarte con estaciones en las que se crucen hasta 4 líneas diferentes. Esto suena muy bien, y aquí funciona de lujo, pero me gustaría ver este sistema implantado en España.
Los andenes son como el doble de anchos que los de allí, cosa sin la cual este experimento nunca habría funcionado. Pues bien, las estaciones de metro tienen exclusivamente dos andenes, uno para cada dirección, obviamente, pero si por allí pasan 4 líneas, como se lo montan?... si, el caos. En hora punta se forma tal multitud que crees imposible que nadie pueda llegar a su destino, salir o entrar del tren, pero sorprendentemente no es así. Cuando las puertas del vagón se abren la muchedumbre se aparta y crean un camino despejado, tal cual hizo Moisés. Y de forma milagrosa todo se realiza con orden y sosiego. La gente que tiene que coger ese tren se encuentra en las primeras filas y conforme más tarde en llegar tu tren más te vas rezagando. Eso es coordinación señores!

Pero lo más curioso es la nula existencia de barreras y controles de tickets. Las maquinitas están en el propio andén y no solo eso, aquí en Colonia las encuentras también dentro del tren!! Al principio de venir no pude resistirlo, y viajé bastantes veces en negro, sin billete, pero es que estaba puesto tan a huevo... te quedas al lado de la máquina y cuando veas al revisor con la gorra roja fosforita venir, lo compras... aunque los muy malditos algunas veces iban de incógnito. Por suerte nunca me pidieron el billete y ahora ya no viajo en negro, ya viajo en blanco.

Como es posible que algo tan normal en las grandes ciudades como es el metro de para escribir tanto.


Un saludo!!


26 de noviembre de 2012

Pixar - 25 Aniversario



Con motivo del 25 aniversario de Pixar, la compañía de animación ha inaugurado en Alemania una exposición que durante un tiempo irá dando la vuelta al mundo.
Aquí se exponen bocetos de los personajes, el origen de sus películas y como fue el desarrollo de las mismas. Y veremos algunos secretos...

Fui con una chica que de alguna forma sobrenatural y sin una explicación lógica basada en el entendimiento y conocimiento humano, nunca había visto Toy Story o cualquiera de las otras películas producidas por Pixar. Es extraño y hasta creo que podemos decir con amargura, que es triste, que exista gente que no haya conocido nunca al gran Sheriff Woody y que no sepa que tienen un amigo en él. O que es posible ir hasta el infinito y más allá. Gente que no sepa por lo menos chapurrear balleno y que no "Harry no! no mires a la luz!! no puedo, es tan bonita... aahhhh!!!"
Por que si, en este amplio mundo hay personas que no ven la relación entre una lámpara y una pelota de goma.



Estaba prohibido hacer fotos más allá de la entrada principal, pero fui incapaz de resistirme a hacerle una foto a estos dos objetos, que por separado son cosas normales, pero que si los juntamos toman un gran significado.


Había una explicación bastante detallada del proceso de desarrollo de los dibujos, la historia y la personalidad de los personajes principales. Además de muchos bocetos de casi todos los protagonistas y antagonistas de las pelis, e incluso había dibujos de algunos personajes que terminaron siendo descartados.






Poco se puede decir de este genial personaje. Empieza medio loco, paranoico con el oxígeno, y terminado bailando flamenco y enamorado de una vaquera, yiiiihaaa!!



El señor Wall.e, es curioso como un cacharro tan viejo y que se le supone carece de sentimientos, puede llegar a ser tan tierno. Desde Buscando a Nemo las pelis de Pixar me habían decepcionado un poco, pero está claro que con esta se resarcieron bastante bien.




La pequeña Dot, os acordáis de Bichos, verdad?
Esa pequeña hormiga revolucionaria que acaba en un circo y conoce a personajes de lo más singulares. Pero que como siempre, acaba volviendo y se queda con la chica... o no!! Spoilers!! realmente espero que todo el mundo haya visto ya estas pelis, sino ya está tardando!!!

Monstruos S.A. La manifestación viva de que realmente si que hay algo que de noche sale del armario, por eso todos dormimos con los pies dentro de la cama, no sea venga Sully y te vaya a coger el pie...

 



El gaaaaaaanchoooo!!! 



Me habría gustado mucho poder poneros más fotos de la exposición, pero había seguratas vigilando y no era plan de que me quitaran la cámara.

Por mi parte, yo disfruté mucho viendo como fue el proceso de desarrollo de personajes tan conocidos para mi y fui rememorando muchas imágenes y situaciones que vi por primera vez, en algunos casos, hace ya casi quince años, que se dice pronto. Además tuve que ir contando de que iba cada peli y porque me emocioné cuando vi un "Andy" escrito en la suela de un zapato.

Si alguien tiene la oportunidad de ir a la exposición, que vaya, sin duda merece la pena ver estos dibujos desde otro punto de vista.

Sayonara Baby! y que la fuerza os acompañe... :D


Un saludo!!



23 de noviembre de 2012

Festín bio de teutones

Una de las cosas más fascinantes de Alemania y su cultura, es la obsesión insana que algunos autóctonos sienten por lo bio.
Es algo que en España no está muy extendido, en los supermercados españoles no se suelen encontrar cosas con la etiqueta de “Bio”. Aunque tenemos los mercadillos, que muchas veces las cosas vienen directamente del campo.
- Desde aquí pido la expansión de Mercadona al resto del mundo, por favor señor Hacendado, piense en la plausible posibilidad de hacer felices a los españoles que estamos lejos de España -
En Alemania también hay mercadillos de esos de fines de semana, en los que podrás diferenciar con claridad si el dependiente es turco o alemán, si es turco oirás el tan familiar ¡Patatas a 1€ señora, a 1€! ¡El kilo de uvas a 2€! quieres probar un trozo de melón?
Por el contrario, si hablamos de alemanes tendrás que llamarles tu la atención para que te atiendan, eso de promocionar el producto a grito pelao va a ser que no.

Pero volviendo al tema, en todos los supermercados alemanes encontrarás un rinconcito donde están los productos bios. Sus características más destacables son 3, a saber:

1º Son productos sin tratar químicamente.
2º Solamente encontrarás cosas de temporada.
3º Valen más o menos riñón y medio. Incluso en algunos casos deberás pagar también un ojo.

Hay tiendas en las que solo venden cosas bio, muy sanas ellas y en las que te cobran hasta por respirar.
Algunas madres histéricas tienen la idea de que cualquier cosa que haya sido tratado químicamente es malo para su Kinder, así que el pobre teutoncito en cuestión es alimentado exclusivamente con productos bios. Con lo que volvamos a la segunda característica, solo de temporada, y ahora recordemos que aquí en invierno hace frío, lo que se traduce en que durante esta época del año el amplio abanico de frutas y verduras a elegir se condensa mayormente en patatas, col blanca, col roja, coles de Bruselas y coliflor, todo sumamente apetitoso y sabroso para los niños.

Al final, muchos de nosotros hemos terminado por comprar solo fruta y verdura que provenga de España y que se queden ellos con sus biopepinos!!!



Pero no os vayáis a pensar que es solo esto, no. Porque en estas tierras han llegado hasta el extremo de crear ropa, zapatos y material de oficina bio. Tiendas enteras llenas de todo tipo de artículos prácticos y/o inservibles, con la etiqueta correspondiente que los autoriza a provocar micro infartos cada vez que alguien observa el módico precio por el cual puedes llevártelos a casa.

Ya llevo un tiempo por estos lares y pensé que no me quedaba nada más bio por ver... pero los alemanes siempre tienen un as en la manga con lo que asombrarte y superarse a ellos mismos en absurdez. Lo último han sido los muebles bio.


Una encimera, un sofá, una lámpara... cualquier cosa que te imagines puedes encontrarla en esta tienda tan peculiar.
Alguien sería tan amable de explicarme en que se diferencia un armario de madera de un armario bio? porque a mi solo se me ocurre que sea comestible. Y como se puede llegar a hacer una lámpara de metal a base de materiales bio?
Nunca he entrado a esta tienda, pero si un cuaderno vale un riñón y por un kilo de tomates bio tienes que quedarte manco, no quiero ni imaginarme lo que debe de costar un sofá bio de tres plazas...
No sé, la verdad es que no termino de encontrarle un sentido a la existencia de estos muebles.

Como se puede tener una obsesión tan grande como para llegar a estos extremos?

Está claro que de nuevo volvemos a que es algo cultural, porque dudo mucho que tiendas de este tipo en España prosperaran mucho.

¿Alguna vez habéis comprado algo bio? ¿Habéis visto alguna tienda de este estilo digna de nombrar?


Saludos!!